miércoles, 24 de julio de 2013

Helado de yogur.

Hoy voy a darle un gustazo a mis niñas (y por qué negarlo, para mí también!!) y les estoy preparando un helado de yogur como esos que venden en las heladerías que están últimamente tan de moda... y que por cierto son tan caras. Lo mismo, o casi lo mismo, pero con productos naturales y nada de grasas "desconocidas". Y además mucho más económico. Y es  que cada vez que pienso en todas  esas grasas que les ponen a los productos de bollería, pastelería, helados,... incluso  platos precocinados, además de otros aditivos como conservantes, estabilizantes, y aromatizantes, me pongo a temblar. Demasiada información, supongo, que tampoco es bueno.

Y además, será algo divertido, porque así podremos poner todos los toppings que imaginemos.

Los ingredientes que  necesitas para hacer tu helado casero de yogur, son muy básicos:
- 4 yogures tipo "griego". Si los quieres semidesnatados, también se puede, pero intenta que sean lo más cremosos posible.
- 200mL de nata 35%m.g. semimontada.
- Un par de cucharadas de azúcar.

Por un lado semimontamos la nata con el azúcar, y por potro batimos los yogures. Finalmente, mezclamos la nata a la crema de yogur con cuidado y en varias tandas para evitar que se baje el montado de la nata.
Vertimos todo en la heladora y esperamos 40 minutos. Rellena un recipiente hermético y guárdalo en el congelador hasta que se termine de congelar.
Si no dispones de heladora, introduce la mezcla en un bol en el congelador, y de vez en cuando bátelo para romper los cristales con el turmix  (al menos tres veces).



Ummmm que fresquito!! Yo al final he optado por un topping de espéculos, y unos trocitos de naranja confiitada que tenía en la despensa. Qué os parece?

Para hacer el topping de espéculos, simplemente tienes que coger una galleta tipo digestiva, meterla en una bolsa de esas de bocadillo, y pasarle el rodillo por encima. Ya ves!!!

domingo, 21 de julio de 2013

El bizcocho 10.

Si quereis conseguir un bizcocho PERFECTO, teneis que considerar una serie de ítems que marcarán la diferencia en el resultado:
1.- El horno tiene que estar caliente. Así que ésto será lo primero que tienes que hacer: enciéndelo.
2.- Pesar escrupulosamente todos los ingedientes.
3.- Tamizar la harina y mezclar con la levadura.
4.- Separar las yemas de los huevos y montar por separado con la mitad del azúcar a utilizar en cada uno de los batidos. En especial, en el caso de las claras, que tendrán que quedar como un merengue y deberás introducirlas al batido en el último momento.
5.- Agregar la harina mientras vas mezclando en varios golpes. Al menos tres.
6.- Y por último, y por ello no menos importante, asegurarte de que el horno no se abra durante la cocción. Sólo podrás abrir al final para ir comprobando, mediante un palillo, que se ha cocido bien por dentro.

Si teneis en cuenta estas observaciones, obtendrás el bizcocho más ligero y  esponjoso que jamás hayas probado. Sólo tendrás que recordarlas para aplicarlas en cualquier receta de bizcocho que tengas.  Mirar qué corte tiene el mío, siguiendo la receta del simple bizcocho de yogur:


Suelo utilizar este molde porque además de que es muy fino y transfiere el calor rápido (otro parámetro importante a tener en cuenta), luego es fácil para servir las porciones.
Otra cosa es que quiera hacer una tarta, que entonces uso un molde redondo.

INGREDIENTES:
-3 huevos.
-1 yogur natural.
-1 medida del yogur de aceite de girasol.
-2 medidas de azúcar.
-3 de harina de repostería.
-1 sobre de levadura química.
- Ralladura de limón o de naranja o una pizca de canela. Lo que quieras utilizar como aromatizante. (opcional)

Monta primero las claras a punto de nieve y añade una medida de azúcar. Sigue batiendo hasta conseguir un merengue. Reserva.
Ahora monta las yemas. Añade un vaso de azúcar. Bate, y agrega el yogur. Sigue batiendo y echa el aceite en hilo fino. Cuando ya estén bien mezclados los ingredientes anteriores, añade la harina tamizada y previamente mezclada con la levadura POCO A POCO! Que se vayan mezclando bien los inredientes. Yo lo que hago es que no apago la batidora y voyechando los ingredientes en este orden.
Una vez lo tengas, apaga la batidora y agrega el merengue manualmente en varias tandas, y mediante movimientos envolventes, para que no se baje.
Vierte en un molde previamente engrasado y al horno a 180ºC durante 25 o 30 minutos. Igual necesita un poco más. comprueba con un palillo el punto de cocción.

Puedes sustituir la mitad de harina de la receta por almendra molida, coco rallado o choloate en polvo (tipo valor). Y verás que bueno!!!


Y si además lo sirves con una salsa inglesa o de chocolate, o acompañado de helado...ummmmmm!!

Masa de pizza.

Seguro que más de un día te ha apetecido una pizza, y has tenido que salir corriendo al supermercado antes de que cerrasen y comprar una de esas congeladas, o refrigeradas. Y de verdad que te ha estado buena?
O peor aún. Has bajado a la pizzería más cercana y has comprado un par. Y qué sablazo!!!  Pero bueno! Que los tiempos que corren no están para eso! Y es que hoy en día o te las ingenias, o es imposible comer bien y llegar a fin de mes.
Pues esto me pasó a mi un par de veces, hasta que me puse las pilas y me metí manos a la obra con las masas. Es que no tiene ni punto de comparación, ya no sólo el sabor, textura y grosor de una pizza artesana, a las que venden congeladas. Y no hablemos de la cantidad de grasas. 
Y lo mejor es que el grado de dificultad: CERO. Lo único que tienes que tener en cuenta es que la masa tiene que reposar una media hora, y que el horno tiene que estar a tope.
Así que animate. Que ya verás que cuando le cojas el gusto, no probarás otras: le puedes poner lo que quieras. Y si además  quieres cuidarte, es que merece la pena!

INGREDIENTES:
- 300g de harina de fuerza.
- Una pizca de sal.
- Dos cucharitas de café de levadura química.
- Un vaso de agua tibia.
- Un chorrito de aceite.

Aunque haya puesto todas las medidas, éstas son relativas, porque al final se hace a "ojo", y vas añadiendo agua hasta conseguir una masa blandita y suave, que no se pega a las manos.
Primero mezclas en un bol la harina con la sal. Y haces un hueco en el centro, donde echas el chorrito de aceite, un poco de agua y la levadura. Con una sóla mano vas amasando poco a poco.
Y digo que con una sóla mano, porque como metas las dos manos en el bol, te pringarás y no podrás manejarte.
Bueno pues con una mano vas amasando como puedas y con la otra añadiendo el agua. Poco a poco, hasta que  se forme una bola, quedando la harina bien mezclada. Entonces la sacas del bol, enharinas un poco la superficie de trabajo y amasas hasta conseguir, como ya he dicho antes, una masa fina, suave y que no se queda pegada (unos 8 minutos). Puedes ir rectificando de harina si ves que te has pasado con el agua.


Una vez tengas la masa, énharina la superficie y cúbrela con un paño limpio y un poco húmedo. Déjala reposar una media hora en un lugar cálido.


Transcurrido este tiempo, sólo te queda estirar bien  la masa, para que quede finita, y cubrir con tus ingredientes favoritos.
Importantísimo que el horno esté a unos 240ºC: a tope!


Yo no necesito muchos ingredientes. Con una buena salsa de tomate, muuucho queso y unas hojitas de albahaca italiana, me sobra.

sábado, 20 de julio de 2013

Una de cócteles!!

Los cócteles son combinados de un licor con zumos, refrescos o infusiones. Se trata de mezclar un sabor con un licor. Y al contrario de lo que estamos acostumbrados, los cócteles deben servirse como aperitivo. Por lo tanto, no tienen que ser dulces, y se sugieren tomar en pocas cantidades.
Ahora bien, más allá de la teoría, y dejándonos de snobismos, lo que todo español suele hacer es como aperitivo tomarse una buena cañita para abrir el apetito, luego pasamos al vino, y los cócteles los dejamos para después. Ya sea para facilitar la digestión , o bien para refrescar las calurosas noches de verano.
En todo caso, y aunque sean combinaciones refrescantes y suaves, no dejan de contener una alta graduación de alcochol, así que te aconsejo, si quieres salir airoso del bar, nunca tomar más de dos copas.
A parte de los cócteles tropicales que tan bien conocemos, existe infinidad de combinaciones y cada cuál más interesante. Está bien que cuando sales por ahí acabes siempre degustando el típico mojito, margarita, piña colada, o si no quieres arriesgar demasiado, un buen gin tónic. Pero si vas a preparar una fiestecilla en casa, no estaría de más que echaras un vistazo a los cócteles que te propongo, y elijas tres o cuatro, según tus gustos, y así sorprendas a tus colegas.



1. "AROMAS DE CANELA".
Ingredientes:
-2 partes de aguardiente de orujo.
-1/2 parte de zumo de limón.
-1/2 parte de zumo de naranja.
-Ginger-ale.
-Un chorrito de jarabe*.
- Un chorrito de canela en polvo disuelta en zumo de naranja.

En un vaso alto con tres cubitos de hielo, ir añadiendo los ingredientes y completar con el ginger-ale. Remover ligeramente y adornar con una rama de canelay una rodaja de limón verde.


2. "RED MARTINI".
Ingredientes:
-3 partes de ginebra.
-1/2 parte de zumo de maracuyá.
- 2 partes de zumo de frambuesa.
- 1 parte de zumo de fresas.

Agita todo en la coctelera llena de hielo y sirve en copa de cóctel.


3. "PANAMÁ".
Ingredientes:
- 4 partes de ron blanco.
-2 partes de zumo de mango.
-1 parte de zumo de naranja.
-1/2 parte de jarabe*.

Agita en la coctelera llena de hielo y sirve en una copa de vino con tres cubitos de hielo y una cáscara de limón verde.

4. "HIGH CLASS MOJITO".

Ingredientes:
-2/3 partes de ron blanco.
-1/2 de triple seco.
-el zumo de medio limón.
-hojas de hierbabuena.
-un chorrito de jarabe*.
-cava o champagne.

Machacar en el vaso mezclador unas hojas de hierbabuena, con un poco de jarabe y el zumo de medio limón.
Añadir hielo, el ron y el triple seco. Remover y colar en la copa, completando con el cava o champagne y guarneciendo con una guinda roja y un par de hojas de menta.
Cuánto glamour en una sola copa!!! por algo que tenga este nombre!Jajaja.


5. "DULCE DE PERA".

Ingredientes.:
-1/2 de zumo de pera, o pera licuada.
- 1/2 de aguardiente de pera "Williams".
- el zumo de medio limón.
-Un chorrito de jarabe*.

En una coctelera con hielo, verter todos los ingreedientes, agitar, colar y servir en copa de vino adornando con una rodaja de pera y hojas de menta.


6. "MANGO SOUR".

Ingredientes:
- 1/2 de ron blanco.
- 2/3 de zumo de mango.
- El zumo de medio limón.
- Un chorrito de jarabe*.
- Un poco de clara de huevo.
Mezclar todos los ingredientes con fuerza en la coctelera con hielo, colar y servir.


7. "ISLA MARGARITA".
Ingredientes.:
- 1/2 de ron oscuro venezolano.
- 1/2 de zumo de manzana verde.
- zumo de medio limón.
- Un chorrito de triple seco.
- Dos cucharadas de azúcar.
Batir todos los ingredientes con hielo picado en una batidora para obtener una textura granizada (cóctel frozen), y decora con una cereza, unas hojas de menta y una rodaja de limón verde.

*El jarabe es simplemente un almíbar de agua, azúcar y unas cortezas de limón apunto de hebra (unos 105ºC), para que quede totalmente disuelto el azúcar y no se quede granulado o en el fondo de la copa. Así nos aseguraremos que está perfectamente mezclado con el resto de ingredientes.

Bueno. Para empezar creo que no está mal. Seguro que alguno se ajusta a tus gustos. Piensa que si no tienes algún ingrediente siempre puedes sustituírlo por otro similar.
Así que elige tu combinación, hazte con un buen surtido de zumos y a degustar!! La fiesta está asegurada.

viernes, 19 de julio de 2013

Alubias con setas.

Que no teneis excusa!!!! No me canso de repetirlo! Si es que parezco Jaime Oliver en sus andaduras como embajador de la cocina en Inglaterra, jajaja. Pero es que, la verdad, comer bien y sano, no sólo es más barato, sino que además, si te organizas puedes prepararlo en menos de 10 minutos. Y un clarísimo ejemplo de lo que hablo, y para que veáis, una vez más, QUE SI ES POSIBLE, lo tenemos con estas alubias con setas. Un plato calentito, sano, nutritivo, equilibrado, barato, y con un montón más de propiedades saludables de las que nos podemos beneficiar.
INGREDIENTES.
- Un paquete de setas ultracongeladas.
- Un bote de alubias cocidas.
- Una cebolla.
- Una pizca de sal y pimienta recién molida.

Lo primero que tienes que hacer es dejar descongelar las setas sobre un escurridor, de forma que puedas recoger todo el líquido que sueltan.
Pica o ralla una cebolla y ponla a pochar en una cacerola. Échale sal para que sude bien, y una pizca de pimienta.
Cuando esté bien pochadita e incluso empiece  dorarse, introduce las setas. Dales un par de vueltas y cocínalas durante unos 3 o 4 minutos.
Entonces, añade el agua que has recogido del descongelado. Agrega las alubias que previamente habrás enjuagado bien , y cubre con un poco más de agua. Deja cocinar el conjunto a fuego muy lento durante unos cinco minutos, rectifica sazonamiento y a disfrutar con una buena copa de vino!!


Mira que pintaaa! Y ésta es la versión económica y "de diario". Pero imagínate desmenuzarle un confit de pato de éstos que venden en el supermercado envasados al vacío listos para consumir...

La tarta de la abuela.

Las recetas de las abuelas son las que no se olvidan nunca...esos olores y sabores que se te quedan grabados para siempre. Recuerdos que perduran eternamente.
Lástima que no tenga un libro de esos donde mi abuela apuntara todas sus recetas. Si fuera así, seguro que mi teléfono no pararía de sonar, con ofertas verdaderamente interesantes. Jajaja! Pero bueno, hay algunas cosillas que tengo en mi memoria, y que poco a poco, y a medida que vaya materializando me comprometo a publicar.
Esta es la típica tarta, que no sólo mi abuela, sino que más de una, habrá preparado en algún momento de nuestra infancia, y que no debería quedar en el olvido. Yo le he dado un toque un poco más actual a la hora de decorarla, pero desde la primera cucharita a la última guarda ese sabor tan característico y a la vez tan peculiar que seguramente tú también guardas en un rinconcito de tus recuerdos.

INGREDIENTES.
- Dos paquetes de galletas.
- Dos sobres de preparado para natillas o flan (tipo Potax).
- Un litro de leche entera.
- 100g de azúcar.
- Una tableta de chocolate para postres, o chocolate a la taza en polvo.
Para decorar yo he utilizado:
- Más galletas para los laterales.
- Azúcar coloreado.
- Un par de galletas digestive.
- Un poco de fondant .
- Un lazo.
Y este es el resultado:


El procedimiento es superfácil. Primero prepara con medio litro de leche y según las instrucciones del fabricante, la crema de natillas.
En otro cazo, funde el chocolate en el otro medio litro de leche, y como has hecho en el paso anterior prepara la crema de chocolate.
Finalmente, sólo tienes que montar la tarta en un molde dessmontable, intercalando galletas, crema de chocolate, galletas, crema de natillas,... y terminando con la crema de chocolate.
Puedes humedecer mediante un pincel un poco las galletas con un poco de licor como Amaretto, anis...o simplemente leche o leche con nescafé y azúcar. Pero hazlo con moderación, porque de lo contrario te quedará muy blanda y no cuajará del todo nunca. Sólo es para aromatizar un poco.
Guarda el molde en la nevera por lo menos 6 o 7 horas. Lo ideal es hacerla de un día para otro, ya que además de coger la consistencia deseada, los sabores mejoran.
Al otro día desmolda, rodea de galletas, que se quedarán pegadas, y fíjalas con un lazo.
Yo le he pueso un poco de polvo de galleta, a modo de espéculos, un poco de azúcar coloreado y unas rosas de fondant en el centro.
Para confeccionar el azúcar de colores, simplemente tienes que meter en un bote un poco de azúcar y añadir unas gotas de colorante alimentario en la proporción que quieras, dependiendo del tono que desees obtener. Tapa el bote, y agita hasta que quede un azúcar homogéneo.
Por otro lado, para el polvo de galleta, mete unas cuantas en una bolsa y pasa el rodillo. Obtendrás una "tierra" que te será muy útil tanto para la decoración de tartas, como helados e incluso en el emplatado de postres.
Ah! un truquito, si sirves la tarta heladísima, ganará un montón. Así que métela en el congelador de media a una hora antes de consumirla, y verás qué buenísima que está.

 
 


jueves, 18 de julio de 2013

Tarta de "chuches".

A cuántos cumpleaños habré ido y siempre con el mismo comentario: "es que la tarta no se la comen, y prefieren chuches." Y  la verdad es que, a mi parecer,  un cumpleaños sin tarta es como un jardín si flores, y  esta moda de pinchar la vela en un trozo de cartón...no tiene mucho sentido.
Pues bien, esta semana hemos estado celebrando el cumpleaños de mi hija y traigo un montón de ideas!!!! Y fáciles y económicas!!! Y por si fuera poco, te aseguro que triunfarás. Los niños pudieron guarrear con las chuches todo lo que quisieron. Y luego la tarta... Y es que los niños son más simples de lo que creemos. No todos los rellenos y las coberturas son acertadas,... incluso el fondant no siempre gusta. Muy bonitas, pero donde se ponga un buen bizcocho de chocolate, que se quite lo demás.
 
 
Que os parece? Bonita, no? Y además de original, fácil, económica y mucho más sana que cualquiera que vendan por ahí, fue un éxito total! La base es un bizcocho de chocolate, luego le puse unos barquillos que sujeté con un lazo, y la rellené con las chuches. Esta versión es la más "ligerita", además de ser la única que podía hacer ya que estamos en pleno Julio y la fiesta fué en la playa. Pero se podrían haber puesto barquillos de esos redondos rellenos de chocolate, o incluso kit-kat.
Luego por encima se pueden poner lacasitos, chocoperlas,... o por qué no ferreros! La verdad es que quedaría muy elegante toda cubierta de estos bombones dorados.
 
Pero bueno dado que era una fiesta infantil, y en la playa, mi combinación era perfecta y aguantó a la sombrita toda la tarde y sin ningún problema.
 
Ahora vamos a ver cómo he preparado el bizcocho.
 
INGREDIENTES. (Un molde de 26cm)
 
-3 huevos.
-1 yogur.
-1 medida del yogur de aceite de girasol.
-2 medidas de azúcar.
-1 y 1/2 de harina de repostería.
-1 y 1/2 de chocolate a la taza (en polvo).
-1 sobre de levadura.
-Una pizca de sal.
 
Primero separamos las claras de las yemas.
Montamos por separado con la mitad de azúcar cada batido.
Cogemos las yemas montadas, añadimos el yogur y seguimos batiendo. Agregamos el aceite. Y luego añadimos la harina tamizada junto con el cacao, la levadura y la sal previamente mezcladas. Lo añadimos en tres veces, y mediante movimientos envolventes.
Finalmente mezclamos con las claras a punto de nieve con cuidado de que no se bajen.
Una vez tenemos la masa, la introducimos en un molde que ya habremos engrasado y horneamos a 180ºC durante unos 25 o 30 minutos. Pincha con un palillo para asegurarte de que  se ha cocido perfectamente.
 


 
 
Una vez se soplaron las velas, quitamos el lazo y se abrieron los barquillos quedando en el centro el bizcocho y las chuches, como si fuera una flor. Luego, partes el bizcocho (cuando ese corrillo de manos en el centro de la mesa te lo permita), y a seguir!
 
Seguro que la repito en algún otro cumpleaños. Los niños disfrutaron por partida doble!!!

sábado, 13 de julio de 2013

Supertarta de chocolate.

Y es que no es para menos. Esta tarta reúne todas las condiciones que tienen que darse para poder  llegar a la categoría de súper: la más rápida, económica, los ingredientes que requiere son de lo más común, muy muy vistosa, apta para todos los públicos y gustos... En fin, es simplemente perfecta si lo que  quieres es sorprender a los tuyos sin complicarte la vida. Lo único que tienes que tener en cuenta es que necesita  reposar unas 6 horas en la nevera, pero he comprobado que de un día para otro está mucho mejor.
Y para que veáis que no exagero, aquí os mando un adelanto, simplemente para motivaros a seguir leyendo...jaja.



A que no está nada mal eh? En sólo 10 minutos y totalmente natural!

INGREDIENTES, para un molde de 26cm.
- 1L de leche entera.
- 2 sobres de cuajada.
- 50g de azúcar.
- 1 paquete de galletas (240g aprox) digestive, napolitana, o las que prefieras.
- 80g de mantequilla.
- 1 tableta de chocolate cobertura negra.

La tarta me ha salido bastante grande, unas 14 raciones. Así que si sois menos, haz la receta utilizando la mitad de cantidades.

Elaboración.
Primero introduce las galletas en una picadora, robot, o en una bolsa y mediante un rodillo las aplastas. Como sea, lo que tienes es que picarlas finamente y luego mezclar con la mantequilla en pomada.
Mediante una cuchara vas forrando la base de una tartera desmontable, y alisando de forma que quede lo más homogénea posible.
Guarda en la nevera mientras preparamos el relleno para que tome cuerpo.

Para hacer el relleno, pica  el chocolate. Disuelve las cuajadas en la mitad de leche y calienta el resto junto con el azúcar y el chocolate. Cuando hierva, añádele la disolución anterior y vuelve a calentar sin dejar de remover hasta  que hierva de nuevo. Déjala en el fuego hasta asegurarte que tanto el chocolate, como la cuajada y el aúcar se han disuelto por completo.

Finalmente vierte la mezcla sobre la base de galletas, mediante un cucharón, de forma que no caiga diectamente en la galleta y la desmenuce. Déjala enfriar un rato en la encimera, y guárdala en la nevera un mínimo de 6 horas. Te recomiendo hacer la receta de un día para otro, porque además de conseguir mejor consistencia, el sabor también mejora.

 
 
Si tienes thermomix o similar, tritura primero la galleta y mezcla con la mantequilla.
Sin limpiar el vaso, pica el chocolate. Echa la leche, los dos sobres de cuajada y el azúcar y  mientras preparas la base de galleta en el molde, programa 10 minutos velocidad 3 a 100ºC.
Vierte sobre la base y enfría en la nevera.
Sorprendentemente fácil, y de escándalo!


viernes, 12 de julio de 2013

Cogollos con vinagreta de avellanas.

 

Has visto cómo puedes alegrar unos simples cogollos? Pues imagínate cualquier otro tipo de ensalada en la que introduzcas más ingredientes. Aunque pensándolo bien, es que a veces, menos es más...y quizás por eso mismo, me quede con estos cogollos. Eso sí, una lonchita de salmón entre la lechuga y la vinagreta no estaría nada mal.

INGREDIENTES.
- Avellanas.
- Miel.
- Mostaza a la antigua.
- Aceite de oliva (del buenooo!!).

Para hacer la vinagreta, he cogido el mortero, he echado unas cuantas avellanas, las he molido, y luego he añadido un buen chorrito de miel, una cucharita de mostaza de Dijón a la antigua y aceite en hilo fino, mientras mezclaba hasta que ha emulsionado.
Luego partes el corazón del cogollo por la mitad, le echas sal, la vinagreta (SIN ESCATIMAR), y abrillanta con un poco más de aceite de oliva.
Y el resultado es simplemente espectacular, ya que la vinagreta agridulce con los cogollos que tienen un punto amargo... buenísimo. Y no sólo tenemos este contraste de sabores, sino que también de textura, ya que al dejar las avellanas un poco enteras le dan ese toque crujiente que tanto me gusta! Y lo mejor de todo sencillo y rápido.

Bizcocho de calabacín y queso.

Llevaba ya mucho tiempo buscando una receta de "bizcocho saladao" que fuera viable, y por fin he encontrado una que para ir empezando no está mal. Es que siempre me gusta hacer pastelitos salados, introducir frutas en platos principales o como guarnición, y mezclar cosas con el fin de sorprender... Y después de haber probado algunas cosillas, me hace ilusión encontrar una masa de bizcocho salado para poder reproducir mini cup cakes salados con alguna crema de queso, sobrasada, setas,... en fin lo que le quede bien al bizcocho.
Así que aquí teneis la masa de bizcocho de calabacín y queso que he estado elaborando esta tarde. Además, y sobretodo ahora que llega el veranito, no está nada mal tenerla hecha, porque luego la acompañas con una ensaladita, una latita de atún o cualquier cosa, y cuando llegues de la playa, te encuentras con la cena hecha.
También resulta ideal como entrante para cuando tengas invitados para cenar  te quieras dejar todo preparado y sólo tengas que emplatar y servir.

INGREDIENTES.
- 3 huevos.
-1 calabacín.
- 60g de piñones, nueces, avellanas,... lo que tengas.
- 100g de queso enmental rallado.
- 100mL de leche,.
-50mL de aceite de oliva.
- 150g de harina.
- 1 sobre de levadura.
- Mantequilla para engrasar el molde.
- Sal, pimienta recién molida, orégano.

En primer lugar, lava el calabacín, sécalo y rállalo escurriendo todo el líquido que puedas bajo un papel absorbente. Es muy importante que el calabacín esté lo más seco posible.

Por otro lado, monta los huevos hasta que adquieran cierta consistencia. Si tienes batidora de varillas, mejor.
Añade la leche y el aceite y ve mezclando con cuidado. Finalmente,  agrega la harina y la levadura previamente tamizadas y mezcladas, en tres veces con mucho cuidado para no bajar el batido.

Salpimentar, añadir las especias que prefieras, los frutos secos y el queso.

Vierte la mezcla resultante en un molde engrasado, y hornear 30 minutos a 180ºC.

Yo he utilizado un molde "de rosco", porque después en el momento de cortar, salen las porciones todas iguales, pero también aconsejo uno tipo plum-cake. O si prefieren, también puedes utilizar individuales o incluso cápsulas de magdalenas.

 
Ah! otra observación, al llevar la masa un sobre de levadura, no estaría de más que dejaras reposar un rato la mezcla (unos 20 minutos)

miércoles, 10 de julio de 2013

Espaguetis con tinta de calamar.

En casa somos unos amantes de la cocina italiana. Tanto, tanto, que tuve una época en la que se convirtió en una verdadera obsesión. Y es que no sólo me encanta la pasta, la pizza y risottos, en todas sus formas (que existen infinitas), sino que estoy completamente enamorada de TODO lo relacionado con la gastronomía italiana, ya sea desde sus ensaladas, aliños, hasta los postres y helados, que sin duda son los mejores del mundo. Además tenemos la suerte de que al compartir clima, podemos disponer de los mismos ingredientes: con nuestro aceite de oliva, los productos de la huerta, las hierbas aromáticas, y un buen vino tinto... No tenemos excusa para vestir nuestra mesa y transladarnos hasta la misma Roma en cualquier momento que lo veamos necesario. Lo digo así porque para mí, a menudo, se convierte en una necesidad.

Bueno, después de confesaros mi debilidad culinaria, voy a ir al grano y contaros la receta que he preparado hoy. Se trata de un plato de pasta ligerito y nutricionalmente hablando bastante completo.
El único ingrediente que necesitas es una sepia, o calamares y unos sobrecitos de tinta de calamar. Si los moluscos son frescos, y puedes retirar la bolsita de tinta sin que se rompa, pues mejor que mejor. Pero si no es el caso, con un par de bolsitas de tinta de calamar que venden en la sección de congelados en el supermercado, bastará.

INGREDIENTES.
500g de espaguetti.
500g de calamares o sepia.
Un chorrito de aceite de oliva.
1 diente de ajo picado.
3 cucharadas de perejil fresco picado.
1-2 guindillas rojas secas.
Un vasito de vino blanco (de los de café cortado).
Un tomate rallado.
Sal.
90mL de agua caliente.

Primero preparemos los moluscos, limpiándolos, retirando la bolsita de la tinta con cuidado de no romperla, y eliminando la pluma cartilaginosa del interior. Trocea los cuerpos y los tentáculos.

Calienta aceite en una sartén, a fuego medio. Añade el ajo, y dóralo. Agrega los trozos de calamar o sepia, 2 cucharadas de perejil y la guindilla. Agregar el vino blanco, tapa y cuece todo durante 20 minutos o hasta que todo el líquido se evapore.

Añadir el tomate rallado y sofreír, con fuego más fuerte hasta que se evapore todo el agua. En la receta original, se añade una cucharada de concentrado de tomate, pero es un producto que no tengo nunca. Prefiero utilizar siempre ingredientes lo más naturales posible. Así que le he añadido nun tomate pequeño rallado (un par de cucharadas) y he dejado reducir.

Una vez se haya evaporado todo, introduce la tinta, el agua caliente y deja cocer el conjunto a fuego suave durante unos 20 minutos. Rectifica el sazonamiento.

Mientras pon en una cacerola agua con sal y cuando empiece a hervir, introduce la pasta hasta que esté al dente. Esto depende del tipo de pasta. Normalmente el fabricante informa en el envase cuál es el tiempo de cocción óptimo.
Una vez tengas la pasta en su punto, escúrrela, y anádela a la sartén donde tenemos la salsa. Remueve bien.
Servir caliente, aderezando con el perejil restante.

Aquí es cuando me pillais, que no tenía perejil fresco. Así que he prescindido de él para hacer la receta, y he decorado con una hoja de albahaca. No tiene nada que ver con el plato, pero bueno, queda bonito.Jejeje... hasta pronto!



Aceites aromáticos.

 

Quieres darle un toque personal  y único a tus ensaladas o pastas? Sólo necesitas unos cuantos minutos, unos recipientes de cristal, aceite de calidad y  una pizca  de creatividad. Te apetece? Hay infinidad de combinaciones, y además quedarán preciosos en tu cocina, como elemento de decoración. A qué esperas?
El procedimiento a seguir es siempre el mismo, sólo cambiará el aromatizante que vayas a utilizar, si es ajo y guindillas, pimienta rosa, tomate seco, perejil y ajo, etc. Lo único que tienes que tener en cuenta es que el elemento que sumerjas en el aceite debe de tener la mínima cantidad de humedad, para que se conserve por más tiempo. De hecho, si utilizas ingredientes totalmente secos como es el caso de hierbas aromáticas, no tendrás ningún problema, y podrás disfrutar de tu aceite durante meses.
En primer lugar, tienes que esterilizar la botella que vayas a utilizar. Cuécela durante 20 minutos, y después sécala bien. Introduce el aromatizante (limpio y seco si son hierbas aromáticas, o retirando el gérmen si se trata de ajo), rellena la botella con aceite de oliva y reserva durante un mes al abrigo de la luz antes de utilizarlo.

 
 
Si lo que buscas es un aceite de cítricos, pela la fruta (pomelo, limón, lima, naranja...), corta a juliana la piel (sin la parte blanca) y escáldala durante un minuto. Luego sécala bien e introdúcela en la botella. 

martes, 9 de julio de 2013

Sorbete de sandía.

Estamos en plena temporada de sandía. Así que aprovecha el momento, y no dejes pasar la oportunidad de acabar cada comida con un trozo de esta deliciosa fruta. Y es que la sandía además de aportar gran cantidad de agua a nuestro organismo, y todos los beneficios que esto conlleva, es una gran fuente de vitaminas, por lo que la convierten en una de las frutas por excelencia de la temporada. Antioxidante, laxante, desintoxicante, purificante, y con bajo aporte calórico, qué más se puede esperar? A pesar de ello, y aunque estemos en temporada, como ya he dicho antes, seguro que te encuentras con alguna que esté un poco golpeada, o simplemente, la tengas ya una semanita en la nevera. Pues bien, con la receta que os traigo hoy, ésto no será ningún problema. Todo lo contrario, podrás preparar un delicioso y refrescante sorbete de sandía, o si prefieres un cóctel de lo más original para sorprender a tus amigos en las noches de verano.

INGREDIENTES.
- Sandía.
- Un par de cucharadas de azúcar.
- Medio vaso de agua.
- El zumo de medio limón.
- Un chorrito de vodka.  (opcional)

Primero, limpiaremos bien  la sandía, quitándole la cáscara y las semillas y trituramos la pulpa hasta que quede un puré.
Mezclamos el azúcar con el agua y cocemos unos minutos hasta formar un almíbar ligero.
Retiramos del fuego el almíbar, añadimos el zumo de limón y dejamos que se enfríe la mezcla.
Mezclamos el almíbar con el puré de sandía, lo vertemos en un recipiente ancho para que se congele cuanto antes y dejamos que repose en el congelador.
Removemos la mezcla cada 30 minutos durante dos horas y luego dejamos que se termine de congelar. Sacamos un ratito antes de tomártelo, y batimos en el momento para romper el hielo.
Acompáñalo con un chorrito de vodka, y dale así un toque rompedorrr!


Además de  novedoso y refrescante, súper digestivo. Atrévete!

Lomo en salsa de naranja.

La cinta de lomo es una carne que al no tener nada de grasa, tiene como inconveniente que tiende a quedarse seca al cocinarse. Y por eso mismo, al tratarse de una carne magra y sin hueso, si la cocinas de la forma apropiada, puede llegar a ser muy agradecida y aceptada sobretodo por los más peques. Si pides en la carnicería que te la corten en forma de mariposa, o libritos, puedes poner en el centro una loncha de queso, o jamón serrano con su grasita y luego empanarlos y freír, o simplemente cocinarla a la plancha con un poquito de orégano espolvoreado.
Y si tienes lo que tienes previsto es dar de comer a  unos cuantos, lo que te recomiendo es que compres una pieza entera y la cocines siguiendo esta receta. Tendrás como resultado una carne jugosísima y  con una salsa original y muy rica. Además, es una receta bastante interesante además de fácil, ya que te permite preparala con antelación y sólo tienes que calentar la salsa en el momento de servirla.

INGREDIENTES.
- Un trozo de cinta de lomo.
- 2 cebolletas.
- 2 naranjas.
- Una copa de licor de naranja (curaçao, cointreau, grand marnier...) y si no tienes, una copita de brandi o cognac.
- Aceite de oliva, sal y pimienta y orégano.


 
En primer lugar, limpia bien la carne, quitándole toda esa grasilla que tiene por fuera. Salpimiéntala, espolvoréale u poco de orégano y dórala a fuego fuerte en una sartén para sellarla y q no suelte su jugo. Resérvala.
Por otro lado, y en la misma sartén o cazuela, pon a pochar las cebolletas picadas. Riégalas con el licor de naranja y flambea. Vierte el zumo de naranja y añade en trozo de carne . Cocina el conjunto a fuego no muy fuerte, hasta que la carne esté hecha por dentro.
Para comprobar que la carne ya está hecha, pincha con un palillo, y si el jugo que se desprende es claro, es que ya está. Si por el contrario, sale rojizo, es que aún le queda un poco. Mi carne tardó como 10 minutos en cocinarse.
Cuando ya esté, saca la carne y tritura la salsa.
Devuelve la salsa a la cazuela. Ahora es el momento de rectificar tanto el punto de sazonamiento como de espesor de la salsa. Si la salsa queda ligera,  añade un poco de maizena previamente diluída. Otro modo de espesar la salsa, y  que yo suelo utilizar, es  añadirle un par de cucharaditas de azúcar y darle fuerza al fuego unos minutos, hasta conseguir el espesor deseado. De esta forma la salsa quedará como caramelizada. Introduce entonces la carne de nuevo y reserva hasta la hora de servir.
 
 
El punto que tienes que conseguir es que por fuera esté bien doradita la carne, y por dentro un poco rosácea. De esta forma quedará jugosa y tierna.
En el momento de emplatar, no hace falta calentar la carne. Simplemente córtala bien finita y nápala con la salsa bien calentita.
Para acompañar, unos ñoquis, un cuscús o simplemente unas patatas y unas verduritas salteadas. Todo depende de la ocasión.
 
 
Quédate con la salsa, y si tienes una ocasión especial, sustituye el lomo por unos magrets de pato a la plancha...ya verás.

viernes, 5 de julio de 2013

Escabeche de cítricos.

Esta receta además de poder permitirnos cocinar de una forma diferente diversos pescados como caballa, sardinas y boquerones, nos ayudará a conservar durante más tiempo éstos así como poder aprovechar restos de pescado frito.
Ayer hice para cenar boquerones fritos y me sobró así como la mitad. Ycomo  ya se sabe, el pescado frito recalentado no vale PARA NADA!!! Por otro lado, cómo no!, me daba pena tirarlo. Así que he decidido hacer un escabeche de cítricos con el que luego serviré mis boquerones "sobrados", y vaya tela con el resultado! Hasta yo misma me he sorprendido! Como hoy venga alguien a casa... se cae "para atrás"

Y no es para menos, porque es que ya sea en ensalada, o sólos,... la verdad es que están de miedo.

INGREDIENTES:)
- Caballa, sardinas, boquerones...
- 100mL  de aceite de oliva.
- La piel de media naranja y de medio limón (sin lo blanco!! que amarga, sólo unas tirillas).
- El zumo de media naranja y medio limón.
- Dos dientes de ajo con piel.
- Pimienta negra en grano, una hoja de laurel mediana, 2 ramitas de tomillo y sal.

Para elaborar el escabeche, primero ponemos a calentar el aceite en una cazuela a fuego suave. Cuando ya esté caliente introducimos los dientes de ajo y los doramos.
A continuación introducimos la hoja de laurel, el tomillos, una cucharadita de pimienta negra en grano y las pieles y zumos de los cítricos. En este punto, si queremos cocinar cualquier tipo de pescado es el momento de introducirlo. Lo  dejamos cocer unos tres minutos y sacamos del fuego

Como lo que yo quería hacer era aprovechar mis boquerones que tenía fritos de anoche, lo que he hecho es dejar cocer unos tres minutos el escabeche, y luego lo he apartado del fuego. Una vez se ha enfriado, he mezclado el escabeche tibio con mis boquerones fritos.
Y lo dejas reposar un par de horas mínimo. Aunque de un día para otro (en la nevera) está mucho mejor.

Coges los boquerones, sacas los filetes, y menuda ensalada, aliñada con el aceite del escabeche...


Aunque sólos resultan un aperitivo espectacular.

Tartar de atún.

Esta receta, si que si, es de mis preferidas. Cada día me gusta más este tipo de cocina, y es que al final me convertiré en "crudívora", ya que cada día evito más los platos muy elaborados y opto por presentaciones lo más sencillas posibles, así como simplemente marinadas, al vapor, o marcadas un poco a la plancha. Y es que cuando disponemos de producto de calidad, es de esta forma como realmente no sólo podemos apreciar todas sus propiedades organolépticas, desde su sabor, olor,texturas... sino que además podemos beneficiarnos de todo su aporte nutritivo, ya que la mayoría de vitaminas, enzimas y otros nutrientes, se pierden  en la cocción. El único peligro que corremos es la posible contaminación bacteorológica que pueda ocasionarse, pero que es un problema que fácilmente solucionaremos asegurándonos que el producto ha sido previamente congelado (en carnes pescados y mariscos).
La receta que os traigo hoy, puede ser para algunos un poco "atrevida", pero os aseguro que si os animáis a prepararla, seguro que repetiis. Te gusta la cocina japonesa? Pues seguro que esta receta te encantará. Así que a partir de ahora cuando vayas a hacer la compra y veas esos lomos de solomillo de atún que te llaman, seguro que no podrás resistirte a ellos. Por lo menos eso es lo que me pasa a mi.

INGREDIENTES (4PAX).
- 2 Solomillos de atún.
- 1 cebolleta.
- Dos cucharadas de aceite de semillas.
- un poco de sal.
- Una cucharita de alcaparras.
- Una ramita de cebollino.
- Media cucharita de mostaza de Dijón ( o de wasabi).
- Dos cucharadas de salsa de soja.
- Un chorrito de lima, y un poco de ralladura (o de jengibre).
- Unas semillas de sésamo negro para decorar y darle un toque crujiente. (opcional)

Preparamos todos los ingredientes.


Picamos el atún a cuchillo, a daditos pequeños según tu gusto, y lo ponemos en un bol. Añadimos las cebolleta también picada y las alcaparras.


Agregamos un poco de sal, un chorrito de lima, la soja, el aceite, la puntita de mostaza. Movemos el conjunto y dejamos tapado con film en la nevera una media horita aproximadamente.
Para servirlos, se pueden presentar para el centro acompañado de pan tostado o biscotes, y decorado con las semillas de sésamo o un poco de cebollino picado.


O en una cucharita individual.


También puedes servirlo sobre un lecho de brotes tiernos o canónigos, a modo de ensalada, o con una base de aguacate a dados con sal, aceite y un chorrito de lima para que no se oxide. Pero esta última versión la veo mejor para el tártar de salmón, que más o menos se hace igual, y que otro día publicaré. Que aproveche!!

jueves, 4 de julio de 2013

Horchata de chufas.

Ahora que viene el calor, tenemos menos apetito y encima todo el día, que mira que son laaaargos, danzando que si al trabajo, a la playa, a comprar... se me hacen las 10 de la noche y todavía estoy por ahí. Pues si, no hay mejor forma de refrescarse y cojer fuerzas que con una horchatita, ya sea a media mañana o para merendar. Si encima la acompañas con un fartón.... entonces te puedes morir!!! Pues si no tienes la suerte de poder degustar una horchata DE VERDAD, la de Alboraya (Valencia), porque te pilla un poquito lejos, estés donde estés, te traigo la solución. Con esta receta podrás elaborar tú mismo la auténtica horchata y disfrutarla en cualquier lugar. Sólo tienes que conseguir chufas y seguir paso a paso mis instrucciones, que son tan sencillas, que no entenderás por qué nunca se te habría ocurrido prepararte tu propia horchata, y en cualquier estación del año!!

INGREDIENTES.
-C/s de agua embotellada. De esto depende el grado de concentración que se quiera obtener en la horchata. Para la cantidad indicada de chufas, se le podría incorporar de 1 1/2 a 2L de agua.
- 300g de chufas.
- 225g de azúcar.

En primer lugar, lava las chufas carias veces para eliminar la tierra que tengan y déjalas a remojo unas 12h, una vez limpias para que se hidraten.

Vuélve a lavarlas transcurrido este tiempo, y escúrrelas.


 

Agrega el agua y el azúcar y tritura bien hasta que quede los más fino posible, mediante turmix o mejor si tienes un robot  de cocina tipo thermomix. Déjalas macerar un par de horas, para que los sabores se mezclen bien.

Cuela la leche resultante mediante un chino y estameña o paño limpio para que se filtre perfectamente, apretando bien para extraer todo el jugo posible.

 
Ahora sólo queda esperar un mínimo de tres horas hasta que se enfríe. Incluso puedes introducirla un ratito en el congelador antes de servirla.


                        100% natural; 100% refrescante; 0% conservantes; 0% estabilizantes.

Así que  ya la tienes! Ahora sólo te falta localizar las chufas. Eso puede ser una misión más o menos difícil. Pero yo las he conseguido en un puestecito de esos que venden frutos secos en el mercado. A ver si tienes suerte y las encuentras. supongo que en grandes superficies también habrán. Corre a buscarlas!!
 

 

miércoles, 3 de julio de 2013

Arroz con costillas y longanizas.

Por qué hacer la paella siempre con conejo y pollo? Todos sabemos que la paella valenciana tiene que llevar determinados productos, pero creo que no hay nada más versátil en la cocina que el arroz. Con carne, con pescado, mariscos, con sofrito, sin sofrito, seco, meloso, incluso dulce!!! Y es que con lo que tengas puedes hacer un arroz impresionante. Ahora bien, lo único que tienes que tener cuidado es con la temperatura y la cantidad de líquido para su cocción. si estos dos puntos los controlas, el resto da igual.
Hoy he hecho una paellita pero en lugar de pollo y conejo, le he puesto costillas y longanizas. Me ha salido un arroz como la paella, pero mucho más jugoso, ya que tanto la costilla como la longaniza tienen algo más de grasa que el conejo y el pollo. Estaba buenísima: el arroz suelto, en su punto, incluso con "socarrat" abajo.


 
Aquellos lectores que, como yo, vivan en la Comunidad Valenciana, esta receta les será poco interesante, pero si no es el caso y te quieres iniciar en arroces, creo que te puede servir de algo.
Los ingredientes son como los de la paella valenciana, pero en lugar de ponerle pollo y conejo, le voy a poner costilla de cerdo y longanizas, que es lo que tenía en la nevera.

INGREDIENTES.
- Unos 9 o 10 trozos de costilla.
- Unas 4 o 5 longanizas.
- Unas judías verdes.
- Dos tomates maduros rallados.
- Un puñado de garrofón.
- Unos caracoles.
- Media cucharadita de café.
- Un poco de colorante o azafrán.
- Aceite de oliva, sal.
- Un limón, para quien le guste aderezarla con el zumo.

Primero calentamos el aceite en la paella, y doramos la carne. Agregamos las verduras y doramos bien el conjunto. Con tranquilidad y sin prisas. Que esté bien hecho el sofrito: ese es el secreto.


Ahora echamos el garrofón, que como el que yo tenía no es de mucha calidad, me da miedo que a veces se pela, así que lo que hago es echarlo un poco más tarde que las judías, para que no esté tanto rato dando vueltas.
Cuando esté bien doradito todo, echamos en un rinconcito el pimentón y casi inmediatamente el tomate. Ten cuidado que no se te queme el pimentón que si no luego amarga.
Y ahora dejamos sofreír bien el tomate hasta que coja colorcito...
 

 


Y  cubrimos de caldo de pollo hasta los tornillos, dejando cocer hasta que las judías verdes estén blandas. Agregamos colorante o azafrán para que tome el color característico. En el caso de la paella, lo cubrimos con agua, de forma que el conejo y el pollo que hay en la paella son los que le confieren el sabor.
Entonces echamos los caracoles y cuando el caldo vuelva a cojer temperatura, el arroz. Este es el paso crucial para que te salga la paella perfecta. Y siento mucho no haberle hecho una foto, pero es que estaba sola en casa y me ha sido imposible echar el arroz y hacerle una foto a la vez.
Para la siguiente prometo  hacer un par de fotos o un vídeo para que veais cómo lo hago.
Hay muchas formas de echar el arroz. Hay quien lo echa en forma de cruz, atravesando la paella, hay quien lo echa en espiral... no sé, para mí la más sencilla es echar por el centro, en la diagonal, haciendo como una montañita de forma que sobresalga un poquito del líquido. Qué pena que no haya foto!!! Lo siento.


 
 
Luego sólo queda esperar unos 18 minutos hasta que el arroz esté en su punto, sin dejar de controlar el fuego que cada vez tendrá que ser menor y si ves que te hace falta caldo, rectifica con caldo o agua muy calientes.
 
El fuego tiene que estar fuerte durante los primeros 8 minutos de cocción, y luego ir bajándolo progresivamente, hasta que a los 18 minutos se apaga, se pone una ramita de romero y se deja reposar. Si está un pelín duro, tápalo  con un papel de horno mientras reposa y con ése calor se terminará de hacer. El tiempo de reposo son unos 5 minutos, y es IMPRESCINDIBLE para obtener un resultado perfecto.

 
 
Anímate y suerte!! Y si no te sale del todo perfecta piensa que los arroces aunque son muy versátiles, tienen su dificultad. Es ir probando, y hasta que no le cojas el punto te recomiendo que utilices siempre la misma paella, ya que las medidas son relativas y todo se hace "a ojo".

Crema de verduras.

Personalmente, no tengo nada en contra de las marcas comerciales que introducen en el mercado productos ya elaborados como cremas, gazpachos, sopas, etcétera, pero pienso que no hay nada más natural, que lo que haces en tu cocina con productos de la huerta y seleccionados por ti mismo. Y es que en realidad, creo que nos engañamos nosotros mismos cuando decimos que no tenemos tiempo, que no se nota,... la verdad es que no tiene ni punto de comparación, y no sólo en cuanto a sabor, sino a la cantidad de estabilizantes, conservantes, aromatizantes, colorantes,...Si miras la etiqueta y empiezas a comparar con la receta casera, mejor no hacerlo.
Y es que hay productos que por su complicada elaboración igual si que merecen la pena. Pero otros como los que ya he menionado antes, que mientras te pegas una ducha al volver del trabajo ya están hechos, que salen más económicos y que además puedes utilizar los ingredientes que más te gusten, sólo le veo inconvenientes en su consumo.
Lo que pasa es que seguro que se trata de un problema de hábito, o desidia.  Pues entonces deja la pereza a un lado y ponte las pilas, porque comer sano y natural es mucho más fácil, y sobre todo económico de lo que piensas!! Y vale la pena, aunque sólo sea por los peques de la casa! Porque no olvides que somos lo que comemos, y que resulta más fácil educar desde un principio.
Las sopas y cremas se hacen solas, y los gazpachos, simplemente introducir en el vaso de la batidora los ingredientes y darle caña!
La receta de hoy es una crema sencillísima de verduras que hago muy a menudo y sobre todo en invierno. Ahora ya tengo mis hijas creciditas y se han habituado a comer casi todo tipo de verduras, pero cuando eran pequeñas la hacía casi a diario para cenar. Y es que todos sabemos lo complicado que es que un niño lleve una dieta equilibrada, y más hoy en día con tanto trabajo, actividades,...
Y es que después de probar mil combinaciones, me quedo con ésta:
- Dos calabacines.
- Dos zanahorias, o un trozo de calabaza.
- Un puerro. Si no tienes, pon una cebolla.
- Una patata mediana.
- Sal, pimienta, nuez moscada.
- Un par de tranchetes (opcional).
- Un chorrito de nata para cocinar.

Introducimos todas las verduras  limpias y troceadas en una cazuela, las cubrimos de agua y cocemos hasta que estén blanditas. Quitale si tiene caldo en exceso y reservalo por si a caso no tiene la consistencia que quieras y  así puedas rectificar. A mí me gusta bastante clarita, pero eso va en gustos. Añade dos tranchetes, si tienes, un poco de sal, pimienta molida, y una pizca de nuez moscada. Tritura hasta conseguir una crema homogénea. Échale un chorrito de nata para refinar la crema y que quede más suave.
Para servirla, tienes muchas opciones, desde espolvorear un poco de orégano y unos picatostes, un poco de queso rallado, según tus gustos y lo que tengas en la nevera.



Y dependiendo de la ocasión, ya que en chupitos resultan un entrante caliente exquisito en momentos especiales, acompañando con un poco de nata montada y espolvoreando un poco de cebollino picado, con un poco de puerro frito, o un crujiente de jamón por ejemplo.


Y es que conociendo el método de elaboración, luego puedes hacer cualquier tipo de crema que se te ocurra, desde la conocida vichyssouse de puerro y patata, u otras que están tan de moda como de remolacha y queso de cabra, de calabaza... se pueden adaptar a cualquier ocasión y son siempre apetecibles. Y dependiendo de los ingredientes que lleven, se pueden servir tanto frías como calientes. Además aguantan en la nevera un par de días sin ningún problema. Qué más se puede pedir??

Como ya habeis visto, preparar cremas es tan fácil, que ahora ya no teneis excusas!
Espero que os haya gustado y sirva de inspiración...Chaooo

martes, 2 de julio de 2013

Caldereta de pescado.

Antes de entrar en faena y explicaros la receta me gustaría aclarar un tema que siempre me ha estado mareando. Y es que siempre oyes hablar de suquet, de zarzuela, de caldereta,... sin tener claro qué es qué y en qué se diferencian. Pues bueno, hoy es el día que voy a poner fin a este dilema, y supongo que el de alguno más.

El término suquet es de origen catalán, y se podría traducir como "suquillo" o más bien, "juguillo", o lo que es lo mismo, "corre y busca pan, que te vas a poner las botas", jeje.

Generalmente se habla de suquet de pescado para un guiso tradicional marinero, que en principio era un plato sencillo y humilde, una receta de aprovechamiento elaborada con los productos marinos que los pescadores no podían vender por su escaso valor o porque habían quedado dañados tras la captura.

Por otra parte, hay que destacar que algunas zonas han aplicado otros nombres a lo que nosotros conocemos como suquet, por ejemplo en Peñíscola (Comunidad Valenciana) se conoce como Remescló y en el norte de Catalunya utilizan habitualmente la denominación Bullinada para este guiso, aunque tiene una característica particular, la base suele ser la anguila.

Se dice que el término suquet hace referencia al jugo que tras la elaboración del guiso se puede disfrutar, un jugo muy gustoso que se enriquece además con otros ingredientes, desde la picada, una mezcla de ingredientes también tradicional de la cocina catalana que se añade para dar sabor y espesar salsas, hasta la patata, que aporta los carbohidratos al plato. La patata es precisamente la principal diferencia entre el suquet y la zarzuela, además de que se originaron en diferentes estratos sociales.

Así pues, ahora que ya lo tengo claro, puedo asegurar que la receta que os traigo hoy es un suquet de peix en Valencia o caldereta de pescado para el resto.




INGREDIENTES. (4PAX)
- 4 lomos de merluza o cualquier otro tipo de  pescado blanco así como mero, dorada, bacalao fresco,..
- 8 gambones.
- 1L de fumét. Para elaborarlo introduce las espinas y cabezas de pescado blanco, a ser posible merluza o rape, junto con una zanahoria, un poco de puerro y una ramita de apio. Cuidado con ésta que es muy potente, así que pon sólo una ramita pequeña. Cuando empiece a hervir cuenta veinte minutos, desespumándolo a menudo ya que soltará bastantes impurezas, y apaga el fuego. Ya lo tienes.
- 1 cebolla.
- 1 tomate muy rojo.
- 3 patatas medianas.
- 2 cucharadas de harina.
- Una cucharita de pimentón.
- Aceite de oliva y sal.
- Para la picada: fríe unas cuantas almendras, unos trozos de miga de pan, unas hojitas de perejil y medio diente de ajo, quitándole el nervio. Coje el mortero y ve picando primero las almendras, luego el ajo, el pan y el perejil, hasta conseguir uná pasta homogénea.
Esta picada la introduciremos cuando ya esté terminada la salsa para potenciar el sabor de nuestro guiso así como para espesar y mejorar la consistencia.

Para preparar la caldereta pon primero abundante aceite de oliva en una cazuela. Cuando esté caliente fríe los lomos de pescado previamente enharinados, y cuando estén dorados, sacalos de la cazuela y reserva.
Introduce en el mismo aceite la cebolla, y dejala pochar. Cuando ya la tengas, añade los gambones. Sofríelos, y cuando ya estén añade una cucharita de pimentón y rápidamente el tomate rallado. Recuerda que el pimentón nunca tiene que quemarse porque te echará a perder  todo el guiso. Así que lo echas y casi a la vez el tomate. Ahora que se haga bien el sofrito. No tengas prisa. Y cuando el tomate esté bien sofrito, añade las patatas chascadas a trozos no miy gruesos y cubre con el fumét.
Déjalas cocer hasta que estén a mitad, unos ocho o diez  minutos creo, y añade el pescado y la mitad de la picada. Ahora deja cocer en función del pescado. No es lo mismo unos lomos de merluza que unas doradas, pero ten en cuenta que el pescado se hace muy rápido y que si te pasas, lo único que conseguirás será que te quede seco. Yo creo que en unos cuatro minutos ya estará. Apaga el fuego y con el calor residual bastará para que se terminen de hacer.
Si queres puedes pelar el marisco, antes de meter el pescado. Así luego no te manchas las manos.

Sírvelo calentito, y espolvorea un poco de picada más por encima, para dar un toque crujiente.
Buenísimo....






lunes, 1 de julio de 2013

Escabeches.


Antes de pasar a elaborar un escabeche, te recomiendo que tengas en cuenta algunos ítems que considero importantes:

Las carnes más idóneas para escabechar, además del conejo son las de pollo, perdiz y codorniz.

Las sardinas son unos de los pescados más idóneos para escabechar. También es válido cualquier tipo de pescado pequeño entero, y mejor los azules o grasos. Hay que ajustar con cuidado el tiempo de cocción a cada especie, en función de su grasa, grosor  y sequedad de sus carnes.

Los escabeches admiten bien todo tipo de especias y hierbas pero, en particular, las más adecuadas son, por una parte, la pimienta negra (mejor en grano) y el clavo. Por otro lado en cuanto a hierbas aromáticas frescas son muy apropiados el tomillo, el romero, la salvia, y sobre todo el laurel, éste último con especial moderación.

Al sustituir las hierbas frescar por las secas debe tenerse aún más cuidado en la cantidad a emplear, ya que las hierbas secas son mucho más poderosas de aroma y fuertes de sabor que las frecas. Si nos pasamos en cantidad, en lugar de dar relevancia al producto principal ocultarán su gusto natural y su aroma propio.

Aunque el escabeche se guarde en sitio frío para su más larga conservación, es conveniente servirlo tibio (tampoco caliente),  a temperatura ambiente, a unos 21ºC aproximadamente.

Si lo que quieres es aprovechar algún producto que te haya sobrado y que ya está cocinado, lo que tienes que hacer es hacer el escabeche a parte y luego mezclar escabeche y producto, teniendo en cuenta que ambos tienen que estar a la misma temperatura, es decir, que la mezcla tiene que ser o bien en frío, o en caliente.

 
Prueba a hacer un escabeche de cítricos para cualquier pescado azul, y luego intrucirlos en la ensalada... Te sorprenderás.
 

Codornices escabechadas.

La receta que os propongo hoy, además de ser sencilla y versátil, ya que admite diversidad de ingredientes, te permitirá elaborarla con antelación para poder así disfrutar del momento, sin tener que estar con prisas y preparaciones de última hora. Además te aseguro que será todo un éxito. La verdad es que si tienes una reunión, quieres quedar bien y sin complicarte, ésta es una buena opción. La receta la he sacado de un libro, que para mi es de los mejores que tengo. Es el de Juan Mari Arzak, "Arzak, recetas". Y de todos los que tiene, en mi opinión, éste es  del que más provecho puedes sacar. Se trata de recetas tradicionales, con ingredientes de andar por casa, pero con toques originales y que muestran técnicas bastante interesantes.

 

Y aunque tenía muchas ganas de llevar alguna de sus recetas a mi mesa, la verdad es que desde  que lo tengo, no he tenido mucho tiempo. Pero ahora, entre las vacaciones y la motivación que tengo con el blog, es el momento de empezar a sacarle jugo. Ya os iré contando. De momento he empezado con una receta de escabeche, que la he adaptado a codornices, aunque la receta original era con conejo.

INGREDIENTES (6PAX).
-  6 codornices.
- 1 vaso de aceite de oliva.
- 1dL de vinagre de vino tinto.
- Una cucharadita de pimienta negra en grano.
- 2 cucharadas de harina.
- media hoja de laurel.
- 3 dientes de ajo con su piel.
- Una zanahoria.
- 2 cebolletas.
- 2 chalotas.
- 2dL de agua.
- El zumo de una naranja. (Es opcional. En realidad no está en la receta original, pero es mi aportación personal.)
- Sal.

ELABORACIÓN.
Primero limpia las codornices, partiéndolas o bien por la mitad, o a cuartos. Eso a tu elección. Esta vez las he hecho a cuartos, pero creo que a la siguiente las haré por la mitad, porque creo que quedará más estético. Sazona y enharina ligeramente los trozos.
En una cazuela grande pon el aceite a calentar, y añade los ajos con su piel.
A continuación fríe las codornices hasta que se doren. Sácalas de la cazuela y resérvalas.
Añade el vinagre, la pimienta, el laurel, el agua, el zumo de naranja y las verduras. Cuécelo todo a fuego medio durante un cuarto de hora. Las cebolletas y las chalotas las he puesto enteritas, y las zanahorias las he torneado, pero puedes símplemente pelarlas y trocearlas como quieras.
Incorpora entonces las codornices y deja cocer a fuego lento unos 45 minutos.
Transcurrido este tiempo, retira la cazuela del fuego para que se enfríe con todos los ingredientes dentro durante aproximadamente un par de horas. Después, o bien se consume o tendrás que guardarlo en el frigorífico. A pesar de ésto, se recomienda servirlo tibio, a temperatura ambiente.
Para acompañarlo, te recomiendo unas verduras escaldadas con aceite y sal, unas patatas fritas a daditos o un cuscús de verduras. También quedan muy bien, y están de moda las ensaladas tibias. Así que si te sobran unos trocitos, no sufras, que te puedes preparar  una ensalada para mañana que ni te imaginas!


Ha quedado chulo verdad??? Pues mejor estaba! Yo lo he acompañado con un cuscus con pasas y nueces, que contrastaban perfectamente.